Las cookies son pequeños y habitualmente codificados de forma aleatoria archivos de texto que ayudan a tu navegador a navegar por una web concreta.
El archivo cookie se genera por el sitio por el que estás navegando y el navegador de tu ordenador lo acepta y lo procesa El archivo de cookie es almacenado en una carpeta o subcarpeta de tu navegador.
Tu navegador accede al archivo cookie de nuevo cuando visitas la web que lo creó.
El navegador utiliza la información que está almacenada en el archivo cookie para ayudarte a disfrutar de una navegación más sencilla por la web permitiéndote iniciar sesión automáticamente o recordando las preferencias que seleccionaste en tus visitas anteriores a la web, entre otras cosas.
Ninguna web puede acceder información de tu ordenador que no sea la que hay en la cookie que ella misma creó en tu ordenador. La cookie no tiene ningún código ejecutable, así que no tiene ningún tipo de "vida propia" más allá del hecho de ser utilizada por la web que la creó.
Como hemos explicado antes, este uso se limita a ayudar a que tu navegador procese la información de la web. Aunque las cookies son archivos de texto incapaces de hacer daño, hay cierta controversia en torno a ellos.
Las cookies se pueden utilizar para registrar el historial de navegación de tu navegador. Si crees que eso perjudica tu privacidad, puedes cambiar los ajustes de tu navegador para limitar el uso de cookies en tu ordenador y recortar su capacidad de hacer registros de tu historial de navegación.